La canción de la mujer del soldado
Bertolt Brecht

 

¿Qué recibió la mujer del soldado
De Praga, la dorada?
Un par de zapatos de Praga llegó,
Zapatos muy finos de Praga calzó.
Eso le llegó de Praga.

¿Y qué recibió la mujer del soldado
De Varsovia, en Polonia?
Una camisa de color de Varsovia recibió,
La camiasa de color con orgullo lució.
Eso le llegó de Varsovia.

¿Y qué recibió la mujer del soldado
De Oslo, en Noruega?
Una estola de piel de Oslo recibió,
Y a sus vecinos envidia les dio.
Eso le llegó de Oslo.

¿Y qué recibió la mujer del soldado
De Rotterdam, la rica?
Un sombrero muy bello de Holanda llegó,
El sombrero de Holanda muy bien le quedó.
Eso le llegó de Rotterdam.

¿Y qué recibió la mujer del soldado
De Bruselas, la gran ciudad belga?
Encajes de Bruselas, de gran distinción.
Hermosos encajes. ¡Oh, qué emoción!
Eso le llegó de Bruselas.

¿Y qué recibió la mujer del soldado
De París, la ciudad de la luz?
Un vestido de seda de París recibió,
Y enorme alegría al verlo sintió.
Eso le llegó de París.

¿Y qué recibió la mujer del soldado
De Tripolí, la africana?
De Tripolí fue el regalo más pobre:
Un dije sencillo y cadena de cobre.
Eso le llegó de Tripoli.

¿Y qué recibió la mujer del soldado
De Rusia, la helada?
Al recibirlo, se quedó muda...
Era su velo de viuda.
Eso le llegó de Rusia.

 

[Schweyk en la segunda guerra mundial, Teatro completo I, Nueva visión, traducción de Nicolás Costa]